Hace ya unos cuantos años, cuando empecé a aficionarme a la costura, arranqué un blog. Había descubierto unos cuantos, casi todos de Estados Unidos y relacionados con patchwork. Me gustó mucho la idea y me animé con el mío. Allí iba compartiendo lo que cosía, y también fotos de lo que me gustaba, incluso alguna receta de cocina.
Estuve escribiendo en el blog durante bastante tiempo, pero llegó un momento en que me suponía más una carga que algo que disfrutase y decidí aparcarlo.
Con el tiempo me he dado cuenta de que hacer algo por obligación, y sin motivación alguna, no tiene sentido. Ni lo disfrutas tú mismo, ni lo disfrutan los que están al otro lado, porque el resultado no es bueno, o al menos no tan bueno como debería ser. En esos casos, lo mejor es parar y dejar que el tiempo te muestre al camino.
Después de estos años de parón me han entrado ganas de nuevo de volver a escribir, de compartir algo más, no solamente fotos y una pequeña descripción, como hago en mis cuentas de Instagram o Facebook.
Así que voy a hacer caso a esta motivación renovada y arrancar otra vez. Muchas veces las segundas oportunidades son mejores que las primeras.
Y ¡allá voy! No sé por cuánto tiempo, pero sí sé que lo haré mientras lo disfrute. Espero que tú también lo hagas leyéndome.
Mi idea es ir contándote un poquito más sobre mí, sobre este pequeño negocio que es Marabara. Sobre mi filosofía, mis valores y porqué hago lo que hago y cómo lo hago. Mostrarte el proceso de diseño, mis herramientas y mi espacio de trabajo. Para que no solamente conozcas mis bolsos sino un poco más, a la persona que hay detrás.
También quiero compartir contigo ideas, inspiración y sugerencias que puedan resultarte útiles.
¡Nos iremos viendo por aquí más a menudo!