Me alegra que tengas entre tus manos uno de mis bolsos. Aquí te dejo algunos consejos para ayudarte a mantenerlo en perfecto estado y disfrutarlo durante mucho tiempo. Solo necesita un poco de mimo y atención para seguir acompañándote día a día.
A continuación encontrarás recomendaciones específicas según el material con el que esté confeccionado tu bolso.
Nuestros bolsos trenzados están hechos con cordón de algodón reciclado. Si necesitas limpiarlos, puedes lavarlos a mano con un jabón suave (como jabón de Marsella).
Frota con delicadeza, acláralo bien y elimina el exceso de humedad.
Déjalo secar en posición horizontal, sobre una toalla, como harías con un jersey.
Evita mojar en exceso las asas de madera o de cuero reciclado. Si se humedecen, sécalas de inmediato con un paño.
También te recomendamos no exponer el bolso al sol de forma prolongada, para evitar que pierda color.
Cuando no lo estés usando, guárdalo en una bolsa de algodón, protegido del polvo y los roces.
Algunos modelos están confeccionados con cuero reciclado, un material muy resistente fabricado a partir de restos del proceso de curtido. Estas fibras se mezclan con látex natural, lo que les da un tacto suave, similar al cuero tradicional, pero con la ventaja de ser reciclado.
Este material cuenta con certificación OEKO-TEX® y es de producción nacional.
Para su mantenimiento, basta con pasar un paño ligeramente húmedo y secar después.
Evita mojarlo en exceso y no lo expongas al sol directo durante largos periodos. Para conservar su forma cuando no los uses durante un tiempo, puedes rellenarlos con papel de seda. Es ligero y se adapta perfectamente al interior del bolso sin deformarlo.
Nuestros bolsos veganos están confeccionados con microfibra de alta resistencia, certificada OEKO-TEX® Standard 100.
Son duraderos, fáciles de cuidar y muy resistentes.
Si se manchan, puedes limpiarlos con un paño húmedo.
Como con el resto de los bolsos, evita la exposición prolongada al sol.
Para conservar su forma cuando no los uses durante un tiempo, puedes rellenarlos con papel de seda. Es ligero y se adapta perfectamente al interior del bolso sin deformarlo.
BOLSOS DE LONA ENCERADA
La lona encerada es un tejido de algodón 100% tratado con cera durante su fabricación. Esto le confiere resistencia al agua, gran durabilidad y un aspecto muy especial. Con el uso, la superficie irá adquiriendo una pátina única, cargada de carácter.
Ese desgaste natural es parte de su belleza: cada bolso se transforma con el tiempo y cuenta su propia historia.
Si tu bolso está confeccionado en este material, no es recomendable lavarlo (ni a mano, ni en lavadora, ni en seco), ya que perdería sus propiedades impermeables.
Cepilla suavemente la superficie para eliminar polvo o suciedad seca.
Pasa un paño o esponja humedecido en agua fría. No frotes en exceso para evitar dañar la cera.
Déjalo secar al aire.
Puedes ver un vídeo con todo el proceso aquí.
En caso de que necesites lavarlo con jabón, ten en cuenta que se eliminará la capa protectora.
Puedes volver a encerarlo para recuperar sus propiedades. Es un proceso sencillo pero que requiere algo de paciencia. Si necesitas ayuda o asesoramiento, puedes escribirme y estaré encantada de orientarte.
Las asas de cuero de algunos modelos están confeccionadas con piel de curtición vegetal, procedente de producción nacional.
Para cuidarlas, ten en cuenta lo siguiente:
Evita mojarlas o exponerlas al sol de forma prolongada.
Si notas que el cuero está seco o apagado, puedes aplicarle una pequeña cantidad de grasa de caballo (disponible en droguerías, sección de calzado).
Después, frota suavemente con un trapo seco para eliminar el exceso y sacar brillo.
También puedes usar una crema hidratante tipo Nivea como alternativa.
Ambos métodos ayudan a mantener el cuero flexible, nutrido y duradero.
Con el tiempo y el uso, el cuero irá oscureciendo de forma natural.
Este cambio no afecta a su resistencia, sino que le aporta carácter y autenticidad.
Descubre todos los materiales que usamos y nuestros valores de sostenibilidad aquí.